Hamburguesas vegetales
Hasta poco estaba muy extendida la falsa idea de que los veganos/as nos alimentábamos sólo de ensaladas. Los tiempos evolucionan (no necesariamente para bien) y ahora da la impresión de que el nuevo mantra que se extiende es que los veganos/as sólo nos alimentamos de hamburguesas vegetales. O al menos, eso podría deducirse por:
- La cantidad de establecimientos hosteleros que, cada vez más, están incluyendo la hamburguesa vegetal en su oferta gastronómica (por desgracia, en muchos todavía como su única opción para veganos/as).
- La cantidad y variedad de marcas de hamburguesas vegetales que se venden en cada vez más comercios y supermercados (y no sólo en las tiendas veganas, ecológicas y similares, como hasta hace poco)
¿Y a qué se debe este boom de las hambruguesas vegetales?
(quiero aclarar que cuando hablo de hamburguesas vegetales, me refiero a 100% vegetal, y no a productos que la industria o la hostelería erróneamente llaman «vegetal» pero que contienen ingredientes de orgien animal. Ver otro artículo sobre el tema aquí)
Por un lado, la industria alimentaria se adapta a las nuevas demandas (por su beneficio, claro), ve nicho de mercado donde antes no había (una creciente demanda de productos vegetales para un creceinte número de personas veganas, vegetarianas, de personas que eligen llevar una dieta a base de plantas, o de personas que incorporan este tipo de productos a su dieta omnívora), se produce un incremento tanto del número de productores (industriales, artesanales, etc.) como de puntos de venta, y se inunda el mercado de una ingente cantidad de hamburguesas vegetales. Y es que es tal la cantidad de combinaciones que se pueden realizar con ingredientes vegetales que la variedad de hamburguesas que se comercializan hoy día es enorme, facilitando así un amplio abanico de posibilidades donde elegir. Y aunque inicialmente estaban basadas en soja, tofu y seitán, ya empiezan a ofertar hamburguesas con otros ingredientes, utilizando otras legumbres y verduras para su elaboración.
Por otro lado, la hostelería ha visto también un filón con estas hamburguesas. Total son fáciles de preparar: se compran hechas, vuelta y vuelta a la plancha, ninguna sofisticación culinaria, no hace falta una formación especial, se pierde poco tiempo en preparar y servir, y se cobra bien (he visto, y he pagado, precios desorbitados por una hamburguesa vegetal en pan de molde, con un poco de lechuga y una rodaja de tomate; y por una hamburguesa servida en plato acompañado de unos pimientos y unas patatas fritas de sobre a un precio que no lo merecía).
Y como decía, el número de consumidores que demandan e incluyen esta opción en su dieta también ha aumentado por motivos ya mencionados anteriormente: facilidad de conservación, preparación, etc. etc.
Pero, ¿son la panacea? ¿son saludables?
El hecho de que encontremos una alternativa a la hamburguesa animal en cada vez más sitios, más al alcance de la mano, y más variadas, parece algo positivo. También reconozco que una hamburguesa vegetal de vez en cuando y con ingredientes saludables puede ser una buena opción, nos puede «salvar» en un momento concreto en el que por diversas circunstancias no podamos acudir a otro establecimiento con más y/o diferentes opciones; o necesitamos improvisar algo rápido en casa, etc,; pero no me parece una opción a tener en cuenta para comer o cenar a diario (y especialmente las realizadas industrialmente, con excepciones) si se quiere llevar una dieta vegetal variada y saludable.
Hay que tener en cuenta que las hamburguesas vegetales que se comercializan, destinados tanto a la hostelería como a consumidores particulares, no dejan de ser productos alimenticios procesados o ultraprocesados, y como tales, el hecho de que sean saludables (o no) dependerá del tipo y cantidad de ingredientes con los que se hagan. Las hay saludables, con buena composición nutricional, con ingredientes ecológicos, sin conservantes, etc., pero también las hay con exceso de sal, azúcares añadidos, grasas no muy saludables, aceites de baja calidad, ingredientes transgénicos, etc. Y tenemos que tener en cuenta que para valorar esta opción en su conjunto, además de valorar la hamburguesa en sí, también habría que valorar la calidad de los otros alimentos con los que se acompañan, se sirven y se comen: el pan, los quesos vegetales, las salsas, etc. A veces, una buena hamburguesa vegetal la fastidian sirviéndotela con un pésimo pan, un queso vegetal poco o nada saludable, etc., (o viceversa, buenos acompañamientos pero una hamburguesa de dudosa calidad, o servida carbonizada, etc).
Por desgracia, en pocos bares, restaurantes y similares vamos a poder tener la información nutricional y composición de las hamburguesas, y en la mayoría de las veces ni siquiera el personal conoce de qué están hechos o qué llevan (aunque por ley deban saber y exponer visiblemente los alérgenos que puedan incluir). En definitiva, cuando comemos una hamburguesa vegetal fuera de casa muchas veces no sabemos lo que estamos comiendo.
Aprovecho para recordar que a la hora de comprarlas en los comercios y supermercados, conviene mirar siempre las etiquetas de los productos, los ingredientes, etc. Así nos informaremos sobre las características nutricionales de los productos, de los ingredientes y sus cantidades, y hacernos una idea de lo saludable o no que puedan ser. De esta manera, también nos evitaremos sorpresas cuando pensábamos que compramos algo vegetal, apto para veganos/as, y resulta que lleva incluídos albúmina de huevo, o proteína de huevo, o derivados lácteos, etc., aunque la publiciten como hamburguesa «vegetal».
Concluyendo, es positivo que los establecimeintos cada vez tengan más opciones para veganos/as, que cada vez más establecimientos se sumen a ofertar opciones vegetales (por desgracia, la mayoría todavía no lo hacen por posicionarse contra la explotación animal), aunque estaría mejor que dichas opciones no se limiten a las hamburguesas vegetales, y que dichas opciones además de variadas también sean saludables. Y por nuestra parte, pienso que debiéramos demandar más platos de cuchara y tenerdor, y menos de comida rápida y procesada (aunque sea vegetal).
Y puesto que, como se suele decir, «como en casa en ningún sitio«, creo que la mejores hamburguesas son las caseras, las realizadas por uno/a mismo/a, y utilizando los ingredientes que uno/a desee. Así que, aquí va una recopilación de más de 200 recetas de diferentes autores, y unos tutoriales para hacer hamburguesas vegetales caseras. Sugerencias para hacerlas a nuestra menera, cambiando lo que queramos, incluyendo los ingredientes que queramos, y en cantidades que queramos (ya que se pueden congelar). Y mucho más barato!!!. 🙂
Tutoriales para hacer hamburguesas vegetales:
Recetas hamburguesas vegetales:
Y hay muchas más. Solo hay que hacer una pequeña busqueda en internet… 😉
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